domingo, 6 de noviembre de 2011

La necesaria agenda de reformas a la legislación financiera


Una serie de leyes y medidas gubernamentales tomadas en Argentina hasta 1973 permitía operar una especie de ingeniería legal y económica que estaba destinada a regular el mercado financiero y el flujo de capitales, pero la dictadura se encargó de deshabilitar y desmantelar la misma. Hoy, en un contexto de crecimiento económico a nivel local, y de crisis profunda a nivel internacional, debe ser parte de una agenda urgente reformar la carta orgánica del BCRA, la ley de servicios financieros y la ley de inversiones extranjeras.

Sin embargo, siguiendo la siempre vigente bifurcación entre “lo urgente y lo importante”, el G-20 realizado en la ciudad de Cannes no ha sido capaz, una vez más, de abordar de lleno los temas que se encuentran pendientes en la agenda internacional y que, al menos como problema, son de unánime reconocimiento.

Según Tiempo Argentino: "El jueves pasado la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en su discurso frente a empresarios y funcionarios del mundo entero, reclamó una política para abordar los problemas que surgen de lo que caracterizó como “el anarcocapitalismo”. Lo describió como un capitalismo rehén de la especulación de los mercados financieros y alejado de la producción y el consumo, es decir, de la economía real.
Las idas y vueltas del gobierno griego de Papandreu alrededor de la convocatoria al referéndum popular para decidir la aceptación del paquete de rescate propuesto por la troika y su propuesta de dimisión generaron malestar e incertidumbre entre los principales gobiernos de la UE que suspendieron el paquete y alteraron la agenda preestablecida en el G-20.
De este modo, no se ha avanzado en consensuar los lineamientos de una reforma de las instituciones financieras que, en definitiva, oficie de punto de partida y sostén para una solución sostenible hacia la infinita crisis del sistema bancario europeo y las deudas soberanas. Abordar seriamente el problema, claro, implicaría afectar intereses muy poderosos.
La preocupación de Cristina y su exigencia a los líderes mundiales para que avancen en una regulación efectiva del sistema financiero resulta de los primeros efectos que esa misma crisis está mostrando en la región. La especulación financiera y la volatilidad se empiezan a manifestar en la fuga de capitales de nuestro país y en las acciones especulativas contra el valor del peso en el mercado cambiario. Ambos procesos ya han motivado medidas prácticas por parte del gobierno, que han involucrado al Banco Central, al Ministerio de Economía y hasta la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
Según un estudio de Ramiro Castiñeira, de la consultora Econométrica, “la formación de activos externos del sector privado en lo que va del año ya es de U$D 22 mil millones, lo que a fin de año superaría el récord del 2008”.
Tiempo Argentino consultó a economistas sobre la raíz de ambos problemas, el alcance de las medidas adoptadas y la agenda de reformas pendientes de resolución en lo que hace a la regulación de los mercados y capitales en el país.
EL ORÍGEN. Los economistas coinciden en no identificar la raíz del problema en una mala percepción de la economía local ni por la supuesta inseguridad jurídica que reinaría en estos lares.
Gabriel Holand de HR Global asegura que “las casas matrices radicadas en Europa y Estados Unidos repatrían todo lo que pueden porque tienen un agujero en sus balances. No están pensando en crecer sino en no hundirse”.
Por su parte, Julio Gambina, del Consejo Directivo de CLACSO, coincidió en que “el problema no está en los pequeños y medianos inversores. El problema central es la Remesa de Utilidades al Exterior (RUE) de empresas que ganan cuantiosas sumas en nuestro país y compensan las pérdidas ocurridas en los países de origen (estimadas en 4500 millones de dólares). Allí debe buscarse la causa principal de la llamada ‘fuga de capitales’”.
Para Alfredo García, economista jefe del Banco Credicoop, ofrece un análisis más fino: “Lo que está pasando es que se incrementó la dolarización de la economía, que es muy distinto a una fuga de capitales. La compra de dólares tiene como destino las cajas de seguridad. Aparecen fuera del balance de pagos, pero están en el país.”. De hecho, para el economista, en realidad “el tipo de cambio multilateral sigue teniendo un buen nivel de competencia”.
MEDIDAS. Según García las medidas tomadas por el gobierno como el decreto 1722/11 son “conceptuales, una señal de que va a haber un mayor control sobre los movimientos de divisas”. En rigor, aclara, “las petroleras y mineras venían liquidando en los últimos años entre el 70 y el 80% de las divisas”. Julio Gambina asegura que “el gobierno aspira a su reinversión en el país” y a “mantener el colchón abultado en divisas como forma de enfrentar cualquier ataque especulativo”.
Con todo, el economista de CLACSO sostiene la necesidad de “ir más allá y revisar el tema de las concesiones por la explotación de los hidrocarburos y recuperar su soberanía; del mismo modo que con el régimen minero”.
EXPERIENCIA INTERRUMPIDA. La legislación heredada de Martínez de Hoz, caracterizada por una baja autonomía respecto al mercado financiero externo y una débil intervención del Estado en la creación y dirección del crédito, es el resultado del desmantelamiento de la arquitectura jurídico-financiera montada por José Ber Gelbard en el año 1973. La misma se caracterizaba por recuperar la autonomía financiera en base al control estatal del comercio exterior de granos (principal generador de divisas) y un fuerte control de cambios. Con esas medidas de centralización se conseguía la determinación local de la tasa de interés. Implicaba, además, la centralización del manejo del crédito en el BCRA. Aquella nacionalización y garantía de los depósitos equivalía, tecnicamente, a un aumento de los encajes hasta el 100%.
LAS TAREAS. Para Alfredo García existe una “agenda de reformas a la legislación que no ha sido tenida en cuenta por la herencia de la concepción neoliberal” que, según precisó, están asociadas a “la profundización del modelo actual y parten de las leyes de la dictadura y de la década del 90’ como la reforma a la ley de entidades financieras, y a la carta orgánica del Banco Central para que amplíe sus misiones y pueda atender asuntos que hacen al desarrollo con inclusión social.”
Gabriel Holand, sin embargo, sugirió que se trata de una utopía al preguntarse: “¿qué es lo que se pretende? ¿poner un fin social en el mundo capitalista en el que vivimos? ¿cómo se hace eso?” Para el economista de HR Global, la tarea que está planteada “es resolver el problema de la inflación” para que el dólar no continúes desvalorizándose. Según indicó, la forma más adecuada sería “meter la mano en la bolsa de los que más tienen.” Para Gambina, “los controles, para funcionar, requieren de participación social, algo bastante alejado de un sistema bancario y financiero extranjerizado. Revertir esa estructura de poder económico involucrando la participación popular es lo que puede hacer efectivo cualquier control”.
Y hoy, aunque pueden existir visiones distintas, y opiniones diversas, lo cierto es que el actual contexto requiere una serie de respuestas y señales firmes y urgentes, las cuales seguramente vendrán a muy corto plazo de parte de un gobierno nacional que ha demostrado no huir de las grandes decisiones, ni temerle a los contextos difíciles, sobre todo después de un 23 de octubre donde se vió ampliamente fortalecido por la decisión popular, que le ratificó su confianza y puso en manos de la Presidenta la responsabilidad de profundizar el modelo de inclusión nacional y popular, en detrimento de los sectores mas concentrados de la economía, los cuales siguen defendiendo a ultranza medidas neoliberales a pesar del fracaso de las mismas a nivel mundial...

(Texto adaptado. Basado en contenido web)

jueves, 3 de noviembre de 2011

Una Argentina fuerte enfrenta la peor parte de la crisis financiera internacional

Por Lic. Gustavo Yllanes (Especial para Argentina23.com)


"Las perspectivas de negocios se ponen sombrías, aunque no se quiera sobreactuar ni promover ulterior alarma. No obstante, se hace cada vez más difícil imaginar desenlaces positivos en los próximos dos a tres años. Por el contrario, los pronósticos apuntan más hacia abajo" dice una nota de análisis publicada por la Revista Mercado.
Las llamadas "economías emergentes" parecen tener mejores posibilidades de supervivencia que las de los países que se autodenominan "centrales", es decir Estados Unidos, Japón y las economías mas importantes de Europa.
Y dentro de las economías emergentes se destaca el "caso argentino", llevando adelante un plan económico diseñado por el ex Presidente Nestor Kirchner, que desobedecía la lógica de la economía tradicional, y los mandatos del FMI y otros organismos internacionales. Este Plan al que algunos calificaron de "heterodoxo" intentando darle una connotación negativa, y que los ejecutores y defensores del modelo aceptamos llamar "heterodoxo" con orgullo y una clara valoración positiva.
Pero la pregunta que debo contestar en mis clases y charlas constantemente es: ¿cuán grave es la supuesta "crisis internacional" que afecta a la economía mundial?. La verdad es que se trata de una suma o combinación de varios factores negativos, los cuales intentaré enumerar en esta nota de opinión, basándome en documentos y análisis de las principales consultoras del mundo.

En un alerta escueto pero inquietante, Global Business Consulting, filial de Deustche Telekom, señala que una combinación de factores negativos se cierne sobre las economías centrales. El panorama económico y financiero se ha deteriorado abruptamente en cuanto va del año y, por consiguiente, la actividad del sector privado se resentirá de hasta febrero de 2013. Es decir, dieciocho meses.
La actual implosión financiera castiga a las principales economías en una fase por demás frágil. “Sería oportuno que ciertos gobiernos o bancos centrales –señala DT-GBC- anunciaran medidas para disminuir temores de que un pánico acentúe ventas de acciones que, a mediados de mes, sumaban US$ 4 billones alrededor del planeta. Pero, al parece, el corriente desmadre continuará causando estragos.
Resulta cada día más dificultoso vislumbrar qué podrían hacer políticos, banqueros y operadores para rectificar esta situación en el corto o mediano plazo. Este análisis pudo haberse hecho durante la recesión de 2008/09, que también exigió dos a tres años. Por ende, hoy los síntomas de otra incertidumbre (escaso crecimiento, volatilidad) apuntan al lapso 2011/13.
Sólo que ahora existen mayores riesgos de caer en un efecto W. A lo sumo, el mejor escenario prevé que la economía real vacile sin rumbo fijo. Su lenta expansión, entonces, llevará varios años más para recobrarse del crac sistémico de 2007/10. En rigor, podría postularse una “maxirrecesión” que tomaría de 2008 a 2013 (¡seis años!), sobre todo en Estados Unidos y la Eurozona.
El componente tecnológico es asimismo inquietante. El mundo ha llegado a un punto donde las corridas contra títulos las conducen supercomputadoras que “conversan” entre sí a velocidad astronómica y venden millones de papeles a medida como caen sus precios. El extremo de lo especulativo se evidencia en una masa de derivados sin techo.
Este trabajo empezó intentando ser un alerta conciso y explicar cómo se llegó a la presente situación. Adicionalmente, la idea es describir las mejores salidas posibles, en mi opinión, y destacar algunas de las falencias incurridas, pretendiendo sintetizar qué significa todo eso para la economía mundial, las empresas y las entidades financieras.
Entre los factores concomitantes a las actuales turbulencias, figuran los que siguen. Primero, la débil, frustrante y errática recuperación tras la crisis occidental de 2007/09. Segundo, los datos macroeconómicos (producto bruto interno), que acaban de revisarse hacia abajo por tercera vez en el año, mientras el desempleo seguía aflojando en forma por demás pausada.

Los emergentes

Tercero, la aparente desaceleración del crecimiento chino, prevista por el gobierno pero que sigue desvelando a los mercados especulativos. Si el menor ímpetu en Beijing se transformase en imprevisto o incontrolado, será catastrófico para la economía global. Igual puede decirse de Brasil, Japón o India.

En cuarto término, los ensayos de resistencia sobre noventa bancos europeos no contribuyeron precisamente a calmar resquemores ni generar confianza. En quinto lugar, el farsesco manejo de la insolvencia soberana griega pone en tela de juicio el liderazgo de la dirigencia regional. Empezando con los cortocircuitos entre la Comisión Europea, el Eurogrupo, el Banco Central Europeo, el Fondo Monetario Internacional y algunos países claves. En particular, los gobiernos europeos han corrido siempre detrás de los problemas. Todo ha sido tardío, lento, reticente y moroso. Así, el actual plan de rescate griego sigue congelado hasta que los restantes veintiséis estados lo ratifiquen. Pero la especulación financiera no aguarda. Otras propuestas sugerían demorar una reestructuración total de deudas hasta 2013/14, imaginando que los mercados esperarían hasta entonces. Una locura.

En sexto término y atinente a liderazgos fallidos, el caso del primer ministro italiano Silvio Berlusconi lo dice todo. Afrontando varias causas penales ligadas a corrupción y prostitución de menores ¿es un jefe de gobierno apto para conducir una estrategia de recuperación económica? Su propio ministro del ramo, Giulio Tremonti, no lo cree así. Tampoco Umberto Bossi, un separatista que lo sostiene en el parlamento. por otro lado, luego del escándalo relativo a medios del ultraderechista australiano Rupert Murdoch y la violencia callejera en Inglaterra, hasta la calidad y capacidad política del premier David Cameron ha quedado comprometida.

Séptimo: los planes pro reestructuración de deudas parecen fracasar en la incorporación de bonistas privados (bancos) a salvamentos en trámite o carpeta. Como observaba un veterano banquero de inversión, días atrás en Francfort, “la Eurozona es incompetente. Se pretende que los bancos aceptemos un desagio de 10 a 20% en nuestras tenencias cuando, en verdad, no debiera bajar de 70%”.

En octavo lugar surge el contagio de tres crisis (Grecia, Portugal, Irlanda) a España e Italia, ambas sumidas en problemas políticos. Esto parece injustificado pero, una vez que los mercados especulativos y las agencias calificadoras se ceban, suben los rindes de cada deuda y aparecen las predicciones autocumplidas.

El noveno lugar es para otro acto de cine de terror: las interminables negociaciones en el congreso estadounidense sobre alza del tope de endeudamiento federal (de US$ 14,3 a 15,4 billones) La primera potencia mundial nunca debiera haberse permitido debates tan irresponsables que pusieron en duda la solvencia nacional. Semejante conducta es condenable y roza en lo criminal. En un terreno técnico y según ha señalado Paul Krugman (Nobel 2008), el acuerdo final sobre recortes presupuestarios simplemente comprometerá por años las posibilidades de recuperación, sin conseguir sus propios fines.

Lenta reactivación

Por cierto, el plan impuesto por la ultraderecha republicana a un presidente en el fondo conservador eleva los riesgos de recesión en W. Para empezar, durante dos a cinco años sencillamente consigna el país a una lenta reactivación.
Por culpa de eso hoy el gobierno norteamericano es disfuncional e imprevisible en lo tocante a la toma de decisiones. Esto constituye una de las grandes amenazas presentes a la economía mundial. No sorprende que varios comentaristas cuestionen la salud mental de varios de ellos, comenzando por su estrella, el precandidato tejano a la presidencia, Richard Perry. Parodiando sin querer al trotskismo, para ese grupo “cuanto peor, mejor”. Esto es, un colapso económico será malo para Barack Obama y, por tanto, bueno para los extremistas republicanos y sus posibilidades electorales. Esta lógica es suicida.

En el décimo puesto figura la degradación de la deuda titulizada estadounidense por parte de la agencia Standard & Poor’s. Por eso, Moody’s Investors Service y Fitch Ratings han referido un compás de espera. Amén de sus obvios nexos con grandes bancas, son las mismas que calificaban AA a Bear Stearns y Lehman Brothers semanas antes de que ambas implosionaron, destino que compartió Merrill Lynch. Esas firmas suelen experimentar tremendos conflictos de intereses, pues les pagan las mismas entidades que califican y a eso se refería nuestro amigo Amado Boudou cuando hablaba de la poca credibilidad de estas empresas. Ahora, las investigaciones federales sobre malas prácticas en S&P o la reacción europea a Moody’s y Fitch parecen bien orientadas. Pero, nuevamente, suenan a demasiado poco, demasiado tarde.

El trío proseguirá, si no lo paran, calificando organizaciones vinculadas al gobierno norteamericano que tienen grados AA o A. Ya ha ocurrido con las inmobiliarias paraestatales Fannie Mae y Freddie Mac. En semanas venideras, se viene una serie de degradaciones que infringirán daños irreparables a la economía y a la confianza del mercado. Se estima que la acción de la agencia elevará a US$ 150.000 millones anuales los mayores costos para obtener crédito para el sector público.

¿Qué significa todo eso y qué puede hacerse al respecto? Parte de la respuesta está en los países emergentes. Sus economías y mercados están en mejores condiciones que los países centrales. Pero, como en 2007/09, el Oeste puede afectar al Este. Así, cualquier baja en la demanda occidental pondrá en peligro la plaza de productos e insumos primarios. Aun así, las economías emergentes sobrevivirán relativamente mejor. Pero varios analistas tienen una mala noticia: esta nueva fase de la crisis occidental arriba cuando gobiernos y bancos centrales de los países desarrollados retienen relativamente escaso poder de fuego. Un ejemplo final: las tasas básicas en EE.UU. y Japón están en casi 0% anual.

Por ello es que la Argentina, blindada por un comercio interno fuerte y consolidado; y con Moreno y la Secretaría de Comercio Interior defendiendo la balanza comercial a rajatabla, se encuentra en un estado de fortaleza frente a esta crisis financiera mundial. Mal que les pese al Fondo Monetario Internacional y varios de sus aliados externos e interno, el "caso argentino" ya es estudiado por las universidades mas prestigiosas del mundo, puesto como un ejemplo a imitar, e incluso diarios como el New York Times elogian sin pudores a la Argentina, e incluso han llegado a pedirle a Obama a través de su editorial económico "que se inspire en la Argentina...".

Interesante, ¿o no?. La seguimos la semana que viene.

Les invito a leer estas notas de www.Argentina23.com relacionadas con mi editorial.

http://argentina23.com/index.php/component/content/article/53-politica/6947-nunca-el-new-york-times-elogio-tanto-a-la-argentina.html

http://argentina23.com/index.php/component/content/article/53-politica/6366-new-york-times-pide-a-obama-que-se-inspire-en-la-argentina.html

Comentarios o contacto con el autor: gyllanes07@yahoo.com.ar o Argentina23@live.com.ar o a través de la Página web: www.gustavoyllanes.blogspot.com

Avances y desafíos en materia de seguridad social en la Argentina


Publicado en Portal Digital de Noticias www.argentina23.com
http://argentina23.com/index.php/component/content/article/35-opinion/7733-avances-y-desafios-de-la-seguridad-social-en-la-argentina.html
"Por Lic. Gustavo Yllanes (especial para Argentina23.com) "Tomando en cuenta lo expresado en la Declaración Universal de los Derechos del Hombre de 1948: “Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene asimismo derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez u otros casos de pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad. La maternidad y la infancia tienen derecho a cuidados y asistencia especiales. Todos los niños, nacidos de matrimonio o fuera de matrimonio, tienen derecho a igual protección social,” en la última década se ha tomado especial conciencia, tanto en los niveles de decisión de las políticas públicas como en la población en general, de la importancia decisiva de la Seguridad Social en la construcción de una sociedad más justa e inclusiva.
En 2001, en medio de la crisis que vivía la Argentina, existía cerca de un 25% de la población desocupada, casi un 50% de adultos mayores sin cobertura previsional y 56% del total de la población en situación de pobreza, con casi un cuarto de la población en situación de indigencia, y un 60% de los trabajadores no registrados.
Desde 2003 el gobierno nacional desarrolla un fuerte cambio en el modelo macroeconómico del país, transformando la matriz existente basada en la acumulación financiera en un esquema de fortalecimiento de lo productivo, con inclusión social. Este cambio produjo resultados inmediatos y sustentables, un crecimiento ininterrumpido en los últimos 8 años, creación de 5 millones de puestos de trabajo, disminución de casi el 40% del trabajo no registrado, recuperación del poder adquisitivo del salario y una notable mejoría general de todos los índices e indicadores sociales.
Los programas sociales son instrumentos de las políticas sociales, son la aplicación operativa de la solución pensada para una problemática detectada. El programa concreta de manera instrumental los acuerdos logrados entre los protagonistas comprendidos en la formulación de este tipo de políticas.
Si tratamos de enumerar algunas de las acciones políticas más significativas, se pueden mencionar los cambios producidos en materia previsional, que se conocen como “Reforma de la Reforma al Sistema de Previsión Social”: En diciembre de 2004 se sanciona la Ley 25.994 —conocida popularmente como la ley de la jubilación anticipada—- que empezó a regir en enero de 2005. Esa ley fue complementada un año después con el dictado del Decreto 1454/05, el cual reglamentó la Ley 24.476 del año 1994. Ambos marcos normativos significaron la incorporación de más de un millón y medio de nuevos jubilados.
Estas leyes facilitaban la incorporación de aquellas personas que, encontrándose en estado de desocupación a diciembre de 2004, registraban todos los aportes al sistema requeridos, pero les faltaban hasta cinco años de edad para adquirir derecho al beneficio previsional. También podían hacerlo quienes teniendo la edad cumplida al 30 de Abril de 2007 o con anterioridad, les faltaban aportes al sistema.
Esos aportes podían ser completados por medio de la moratoria establecida en la Ley 25.865 y en las condiciones dadas hasta julio de 2004, y quienes cumpliendo la edad antes de la derogación del régimen (30 de Abril de 2007), completaren los aportes anteriores al 30 de septiembre de 1993 en las condiciones indicadas también por la Ley 24.476 y el Decreto 1454/05.
Es decir, aquellas personas que, producto de las privatizaciones de la década de los noventa, se quedaron fuera del mercado laboral, siendo aún jóvenes para jubilarse pero “viejos” para obtener trabajo, luego de toda una vida de esfuerzo, o aquellas personas que teniendo la edad para jubilarse no habían completado la totalidad de los aportes requeridos, pudiéndolo hacer mediante la moratoria prevista en la Ley 24.476.
El Poder Ejecutivo Nacional en febrero de 2007 envió un proyecto de ley al Congreso para reformar el Régimen Previsional, que fue sancionado el 28/2/2007 y se transformó en la Ley 26.222 (B.O. DEL 8/3/2007). Esta nueva ley introdujo más cambios significativos en favor de los beneficiarios.
Con la sanción de la Ley Nº 26417 se logró la sistematización de un esquema de movilidad jubilatoria que permite el cálculo en marzo y en septiembre de cada año, del incremento que debe aplicarse sobre los beneficios del sistema, situación que no se daba desde 1995.
Impacto de los cambios en la políticas sociales
Si queremos mencionar el impacto de estas políticas sociales, debemos tomar en cuenta que, por ejemplo, el Plan de Inclusión Previsional implementado en 2005 permitió la incorporación al sistema de personas que se encontraban excluidas como resultado del desempleo y el empleo informal. De esta forma, se logró la recuperación de la tasa de cobertura pasiva al permitir que cerca del 90% de la población en edad de jubilarse cuente con un beneficio.
El reconocimiento del derecho a la pensión para parejas del mismo sexo, la mejora constante en la liquidación de sentencias judiciales, la reducción de los tiempos de pago de las prestaciones, la Asignación Universal por Hijo y por Embarazo para Protección Social, por ejemplo, son también acciones y decisiones políticas implementadas a partir de necesidades sociales, y del fuerte compromiso del gobierno nacional con la inclusión de los sectores de la población más desprotegidos, e históricamente más olvidados.
En cuanto a la Asignación Universal, sus resultados en términos cuantitativos indican que redujo entre 55 y 70% los indicadores de indigencia, redujo la desigualdad entre los que ganan más y los que ganan menos ubicando a la Argentina como el país mas igualitario de América Latina. También ha tenido un poderoso impacto en la reducción de los índices de pobreza, aunque menor a lo esperado, o inicialmente planificado.
Y en términos cualitativos no pueden negarse las mejoras en el cuidado de la salud de las embarazadas y los niños; y en la permanencia y regreso a la escuela de los menores beneficiados por el programa.
Pero teniendo en cuenta que este tipo de programas sociales tienen ciertas limitaciones, deben ser integrados con otros que apunten a la autosuficiencia de las familias, y no a una dependencia permanente de los planes. Por ello la iniciativa de “Argentina Trabaja”, (y otras similares) deberían promoverse como un complemento de los planes de asistencia.
Otra área a la que se ha dado especial énfasis es la relacionada a las Pensiones No Contributivas (PNC). Este es un programa asistencial destinado a mitigar los problemas relacionados con la pobreza, que en los últimos años ha crecido de 175.000 beneficiarios en 2003, a cerca de 700.000 en la actualidad, basado en una decisión del gobierno nacional de no poner topes presupuestarios a la asignación de estos beneficios, que hoy están a disposición de todos los que cumplen con los requisitos para obtenerlos, principalmente madres de 7 o mas hijos, y personas discapacitadas.
Grupos sociales destinatarios de la políticas sociales
Principalmente para el crecimiento de las prestaciones de seguridad social se han determinado los grupos sociales más vulnerables de acuerdo a varios criterios: por segmentos etáreos: niños y ancianos; por características sanitarias: discapacitados e incapacitados para el trabajo; y por características económicas: pobres e indigentes.
Tareas pendientes para el futuro inmediato
Siguiendo el criterio de la “Jerarquía de Necesidades” de Abraham Maslow[i], tras cubrirse las necesidades básicas o primarias de supervivencia aparecen nuevas necesidades de mayor nivel. En la actualidad, a pesar de los grandes e importantes avances realizados en seguridad social, creo que existe un aspecto más en el que hay que avanzar: el acceso a una vivienda y a condiciones dignas de habitabilidad.
La vivienda es el lugar de refugio que necesitan las personas para protegerse, resguardarse de las inclemencias del tiempo, preservar su intimidad, y en la mayoría de los casos, representa el lugar de asentamiento no solo de personas individuales sino de núcleos familiares, estructuras básicas del cuerpo social. Es una necesidad humana de segundo nivel, pero tan básica como el alimento, el abrigo o el descanso.
La Constitución Argentina y diversos instrumentos internacionales reconocen el derecho a la vivienda, como el artículo 25 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948) el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales que en su artículo 11 dice “…el derecho de toda persona a un nivel de vida adecuado para sí y su familia, incluso alimentación, vestido y vivienda adecuados…”, también se halla enumerado entre los Derechos del Niño (artículo 27 de la Convención), en el artículo 5 de la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial y en la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (art.14).
La Recomendación 115 de la Organización Internacional del Trabajo sobre la vivienda de los trabajadores y sus familias que se desplazan dentro de la comunidad, exhortó a los estados miembros a no discriminar a los trabajadores extranjeros en la adjudicación de viviendas otorgándoles las que se consideren normales en ese lugar.
Las Naciones Unidas han implementado conferencias sobre este tema, como Hábitat I, en 1976 que tuvo como sede a Vancouver (Canadá) donde se les reclamó a los estados que arbitren urgentes soluciones al problema habitacional. En 1996 se repitió la experiencia con Hábitat II, esta vez con sede en Estambul, donde se declaró a la vivienda como derecho humano fundamental reconociéndose el gran papel de las ONG (organizaciones no gubernamentales) con un gran rol en la solución del problema.
Casi todas las personas poseen vivienda, como lugar donde vivir (aunque muchos viven en la calle, en gravísima situación de riesgo) lo que dista mucho de suponer que la mayorías de la gente posea una vivienda digna. Este derecho está consagrado en la Constitución de la Nación Argentina, entre los derechos sociales incorporados en la reforma de 1957, por el artículo 14 bis, pero aún es un deseo incumplido, más que un derecho garantizado. Esta imposibilidad de contar con una vivienda propia o alquilada, va de la mano con la pobreza, que a su vez está íntimamente relacionada con la falta de trabajo o el trabajo precario. Argentina cuenta con aproximadamente 2.000.000 de viviendas que podrían considerarse no dignas.
¿Qué es una vivienda no digna? Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos de la Argentina (INDEC) son viviendas precarias de zonas rurales, los ranchos, con techos de paja, pisos de tierra y paredes de adobe, y las casillas de chapa de las ciudades, los conventillos y los inquilinatos, donde no hay resguardo de la intimidad, y se comparten por ejemplo, los baños entre varias familias, y las viviendas móviles, como habitar en casas rodantes, o vagones de ferrocarril. Asimismo, las villas de emergencias asentadas en terrenos fiscales son un grave problema social, ya que junto a familias de trabajadores, se mezclan personas que viven al margen de la legalidad.
Para hablar de vivienda digna, además de tratarse de casas de material, deben contar con las mínimas condiciones sanitarias para preservar la salud de sus moradores, como provisión de agua potable o servicio de desagüe cloacal.
Siguiendo con los datos de los censos que brinda INDEC, muchas personas son dueñas de la edificación pero no del terreno donde han sido construidas las viviendas, pues por el costo de los terrenos han edificado en tierras fiscales, o en lugares donde los dueños estaban ausentes, en estos casos, muchas veces las mismas viviendas son usurpadas, por estas personas sin techo.
Otro grave problema del déficit habitacional es el hacinamiento, que el INDEC considera crítico cuando más de tres personas comparten una habitación dentro de la vivienda.
Conclusiones:
Pese a los faltantes, la Argentina ha implementado cambios significativos en las políticas sociales que han permitido inclusión e igualdad para la mayor parte de los argentinos, orientado especialmente a los sectores mas desprotegidos. El reconocimiento de los valores humanos de igualdad, y una economía social cuyo objetivo es que todos puedan verse beneficiados (y no solo los mas aptos) ha ubicado a nuestro país a la vanguardia de los cambios a nivel internacional, e incluso en un ejemplo a seguir para muchos países donde se profundizan las desigualdades.
El próximo gran desafío, que ya ha sido explicitado por la Presidenta y su candidato a vice Amado Boudou, es que todos puedan verse incluidos a través de un trabajo digno, de modo tal que los planes sociales como la Asignación Universal por Hijo vayan desapareciendo por falta de demanda y no por decisión gubernamental.
El otro gran desafío de la seguridad social en Argentina es avanzar en las áreas que todavía presentan déficits, como por ejemplo el acceso a la vivienda digna. Pero de eso hablaremos en el próximo editorial..."


(Texto adaptado. Basado en contenido web)

Líderes y responsables (Escrito para "The Mendoza Post")


Como quien encara una cuesta montañosa, la campaña de “Paco” Perez en Mendoza arrancó con firmeza y lentitud para ir tomando progresivamente una velocidad de acción muy interesante, que lo depositó virtualmente en el Sillón de San Martín. El total apego al mandato de quienes conducían la campaña (fundamentalmente Mario Riorda) fue una de sus virtudes, conociendo que en plena campaña todos quieren aportar y a veces eso confunde mas de lo que ordena.
Ubicado ya en la altura máxima de esa montaña ve con un mejor panorama lo que tiene por delante, pero debe lidiar como primer tarea de gobierno, antes de asumir formalmente, que es la de armar su equipo de trabajo, con la titánica influencia de los diversos grupos de presión: los sectores internos partidarios, los grupos económicos, el gobierno nacional, los sindicatos, y todos los que quieren “cobrar” su aporte a la campaña y al triunfo final con cargos. Y hablamos de un triunfo para algunos impensado hasta hace pocos días.

Tiene a su lado a Carlos Ciurca, un titán de la política, un todo terreno capaz de enfrentar con valentía y sin renunciamientos a todos los que haya que enfrentar, y a construir consensos con todos los que haya que construirlos, animado además por la urgencia de construir un colchón de poder propio que le de soporte en la nada sencilla tarea que tiene por delante.
Pero además tiene como punto a favor la “luna de miel” de los primeros días de gobierno, donde deberá demostrar la misma dinámica de escuchar y responder a los diversos requerimientos populares que le dio la fortaleza para ganar estas elecciones, algo así como una extensión de la “Iniciativa Mendoza” desde la gestión, para evitar lo sucedido con Celso Jaque, que ganó la provincia por sus recorridas y su cercanía con la gente, pero perdió credibilidad por no extender esa metodología una vez asumida la función de gobernador.
“Paco” y Carlos son hoy líderes y responsables del futuro de Mendoza.
Léalo bien: escribí líderes y responsables, que al oído suena igual pero no es lo mismo que ser líderes irresponsables… las decisiones y la carga están hoy sobre sus espaldas. La mayoría del pueblo mendocino les dio ese mandato el domingo 23 de octubre, y está atento a sus acciones y decisiones, seguros de que sabrán llevarnos al sitial que nuestra amada Mendoza merece en el país y en el mundo.
Lic. Gustavo Yllanes